Bendícenos, Señor, y bendice estos alimentos que por tu bondad vamos a tomar. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
O bien:
Protégenos, Señor, Dios nuestro, y concédenos el sustento que necesita nuestra debilidad. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
O bien:
Bendícenos, Señor, a nosotros y estos dones tuyos que vamos a tomar y que hemos recibido de tu generosidad. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
Después de la comida, todos se santiguan, luego:
Te damos gracias, Dios todopoderoso, por todos tus beneficios. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
O bien:
Nos hemos saciado, Señor, con los bienes que nos has dado; cólmanos también de tu misericordia. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario