Corazón, sé una puerta cerrada para el odio:
de par en par abierta siempre para el amor.
Sé lámpara de ensueños celestes, y custodio
de cuanto noble germen nos prometa una flor.
Corazón, ama a todos, late por todo anhelo
santo, tiembla con todo divino presentir;
da sangre a cuanto impulso pretenda alzar el vuelo;
calor a todo intento de pensar y vivir.
Sé crátera de vino generoso, que mueva
a los grandes propósitos. Sé vaso de elección,
en donde toda boca sedienta la fe beba.
Sé roja eucaristía de toda comunión,
corazón.
de par en par abierta siempre para el amor.
Sé lámpara de ensueños celestes, y custodio
de cuanto noble germen nos prometa una flor.
Corazón, ama a todos, late por todo anhelo
santo, tiembla con todo divino presentir;
da sangre a cuanto impulso pretenda alzar el vuelo;
calor a todo intento de pensar y vivir.
Sé crátera de vino generoso, que mueva
a los grandes propósitos. Sé vaso de elección,
en donde toda boca sedienta la fe beba.
Sé roja eucaristía de toda comunión,
corazón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario