Que en la Gloria estés, santa Marciana de Mauritania, en compañía de los seres celestiales. ¡Cuánta brutalidad y salvajismo hay dentro de algunas personas! Santa Marciana, viviste en una época muy dura para los cristianos. ¡Qué valentía y fortaleza! Que tu ejemplo lo tengamos presente en nuestras vidas, para recordar la crueldad de esos tiempos.
En este día , santa Marciana, te ruego intercedas ante nuestro Señor Jesucristo, si así Él lo tiene dispuesto, a favor de restaurar la salud del alma, espíritu y cuerpo de N (nombrar a la persona enferma).
¡Jesús, confió en Ti! Jesús, te pido que perdones sus pecados y lo consideres merecedor de recibir el regalo de tu Gracia Divina, la sanación. Jesús, te imploro, Tú que todo lo puedes y conoces de nuestras necesidades, lleva tu mano amorosa y sanadora hacia él, dale tu bendición. Señor, envíale luz en su senda de vida, para que pueda dejar atrás pesares y enfermedades. Señor, infúndele fe, esperanza y alegría. Jesús, que se haga tu voluntad.
Santísima Virgen María, Madre de Jesús y Madre nuestra, te ruego lleves hacia N (nombrar a la persona enferma) tu mano amorosa y maternal, hazle saber cuánto lo amas y lo cuidas. Madre, te pido que lo tengas bajo tu Sagrado Manto, protegido de todo daño y ataque del maligno. Gracias, Madre, por atender mi petición.
Pido perdón por mis pecados de la misma forma que perdono a los que me faltaron. Que así sea. Amén.
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