| Yo te amé cuando niño como un anhelo, te amé de adolescente como un deseo, y mi amor cuando hombre fue un sentimiento.
Tú me amaste de niña | | | | como un recreo, | | | | luego de adolescente | | | | como un muñeco, | | | | y ya mujer, he sido | | | | tu pasatiempo.
¡Qué extraño que mi alma sea tu juego, y la tuya... la tuya sea mi infierno. | | |
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario