Omnipotente Señor y Dios eterno, supremo dispensador de todos los dones, que por tu infinita bondad adornaste al glorioso san Marcelo con la excelentísima virtud de una fe viva y pura, a cuyos impulsos postergó los honores terrenos, arrojando las insignias militares que le distinguían, y protestó con pasmo de los idólatras, que jamás tributaría a los mentidos dioses los cultos y soberanos sacrificios, que solo son debidos a Ti, Deidad suprema: yo te suplico que infundas en mi alma una fe tan viva y pura que jamás lleguen a amortiguar la tibieza de mi corazón y las malas operaciones de mi voluntad; confesando los Santos Sacramentos, y todos los misterios que cree y confiesa nuestra Santa Madre Iglesia. Asimismo encarecidamente te ruego que por los méritos del esforzado confesor de la fe, el gran san Marcelo, me concedas el favor que ahora te pido, si ha de ser para mayor honra y gloria tuya y bien de mi alma. Amén.
(Hacer la petición)
No hay comentarios:
Publicar un comentario