Dios todopoderoso y eterno, que concediste a san Valeriano luchar por la fe hasta derramar su sangre, haz que, ayudados por su intercesión, soportemos por tu amor nuestras dificultades y con valentía caminemos hacia Ti, que eres la fuente de toda vida. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo. Amén.

No hay comentarios:
Publicar un comentario