Querida Virgen de Fátima, vengo hacerte un encargo muy especial. En vida le diste mucha protección y guía espiritual a los niños, les enseñaste a valorar la palabra de Dios y a querer vivir en bendición. De la misma forma vengo a pedirte por su protección, para que los mantengas a salvo de tanta maldad en el mundo.
Recuerda, amada Virgen de Fátima, que ellos tienen algo muy hermoso y es un alma inocente que apenas comienza vivir. Protégelos de todo mal o cualquier enfermedad porque realmente son hermosos e inocentes. Los niños merecen el mejor trato de este mundo, que nunca les falte el amor y alimento.
Ilumina a los que a una corta edad se encuentran perdidos o secuestrados, protégelos y ayúdales a volver con sus padres. Derrama suficiente bendición a su vida y dales la gracia de la responsabilidad como virtud a sus padres para que luchen por ellos. No los abandones ni en la salud ni tampoco en la enfermedad y protégelos siempre que lo necesiten. Ilumínalos con tu radiante luz, ayúdales a cumplir sus sueños, a tener sólo gracia en su corazón y no maldad. Ayúdales a defenderse porque por ellos solos no pueden.
Con tu manto misericordioso perdónalos si están solos, no es su culpa. Incúlcales la virtud del amor al prójimo para que hagan de este un mundo mejor cuando crezcan. Ayúdales a lograr todo lo que se proponen, a crecer sanos y fuertes. Coloca tu santa mirada en aquellos que están padeciendo enfermedades o la falta de alguna extremidad.
Hazles saber que eso es normal y pueden seguir adelante. Cúbrelos con mucho amor, santísima Virgen de Fátima.
Gracias por atender mis súplicas, porque mi corazón quiere que protejas a todos los niños del mundo. Amén.
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