MEDITACIÓN JUEVES III TIEMPO ORDINARIO A (P. Damián Ramírez)

 

Lectura del santo evangelio según san Marcos 4, 21-25

En aquel tiempo, Jesús dijo al gentío:

- «¿Se trae la lámpara para meterla debajo del celemín o debajo de la cama?, ¿no es para ponerla en el candelero?

No hay nada escondido, sino para que sea descubierto; no haya nada oculto, sino para que salga a la luz. El que tenga oídos para oír, que oiga».

Les dijo también:

- «Atención a lo que estáis oyendo: la medida que uséis la usarán con vosotros, y con creces. Porque al que tiene se le dará y al que no tiene se le quitará hasta lo que tiene».

"Atención a lo que estáis oyendo" (Mc 4,21-25) 

Señor Jesús, ¡cuántas cosas estamos escuchando en este tiempo que nos toca vivir! ¡Cuántos mensajes nos llegan desde mil sitios, nos bombardean y logran convencernos de casi cualquier cosa! ¡Cuánta fake new que terminamos asumiendo como verdad! Hazme atento a la realidad. Dame la capacidad de escucha necesaria para que nada de cuanto acontece me sea ajeno. 

Señor Jesús, tu Evangelio de hoy nos dice que estemos atentos a lo que estamos oyendo. Haz que tu Palabra sea para mí el primer criterio de actuación. Haz que sea eso lo que escuche con el corazón y se convierta para mí en la verdad que guíe mis pasos. Haz que me haga cargo de la realidad, haz que cargue con ella y me encargue de ella. 

Señor Jesús, hazme atento a lo que oigo. Y de todo ello afina mi escucha para que no me pierda nada, sobre todo nada que pueda ayudarme a vivir más plenamente y ayude a otros a vivir con sentido y profundidad. 

Así te lo pido. Así sea.