Padre Serafín, siervo humildísimo de Dios, bendice a los peregrinos como bendices a todos los que te visitan en tu santuario para pedir tu intercesión. Intercede también por nosotros ante el trono de gloria de la Santísima Trinidad para que podamos perseverar en nuestro camino de entrega a Dios y a nuestros hermanos.
Nos confiamos a ti como padre y guía nuestro. Invoca para nosotros la presencia del Espíritu Santo para que nos asista en todas nuestras necesidades. Te confiamos nuestra vida de todos los días para que podamos ser fieles, como tú lo fuiste, a todo lo que Dios quiera y disponga de nosotros. Amén.
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