Bienaventurado mártir san Román Adame, patrono de la caridad y del amor al prójimo, alentado por mi fe sincera acudo a ti lleno(a) de confianza. Tengo muchas necesidades. “Santo mártir‟, acompáñame ante la presencia de Cristo, nuestro Mediador supremo, por quien diste generosamente tu vida en la cruz.
Dile que me ayude a resolver mis problemas y que socorra pronto mis necesidades, especialmente... (aquí mencione su necesidad especial). Pide también a Cristo y a María, su Madre, que aumenten mi Fe, aviven mi esperanza, e intensifiquen en mi corazón el amor a Dios Trino, y a todos mis hermanos y hermanas, sin distinción. Alcánzame más fervor en la oración y una entrega más entusiasta a la propagación del Reino del Padre en el mundo.
Que, siguiendo tu ejemplo heroico, esté yo siempre dispuesto a vencer todas las dificultades y tentaciones. Que cumpla con fidelidad los deberes de mi estado de vida. Que, con generosidad, sepa abrazar y llevar mi cruz de cada día, subiendo decidido a mi calvario, hasta exhalar mi último suspiro.
Finalmente, mártir dichoso, ayúdame a conseguir que después de haber vivido y muerto por Cristo, como tú, merezca obtener también el laurel de la victoria, y el premio de la felicidad eterna, reservados a los fieles hijos e hijas de Dios. Amén.
(Se concluye con un Padre Nuestro, Ave María y Gloria al Padre)
No hay comentarios:
Publicar un comentario