MARTIRIO DE SANTA QUINTA
Los perseguidores de los cristianos condujeron a una mujer cristiana, por nombre Quinta, hacia el templo de los ídolos y querían obligarla a que adorara. Pero ella les volvió la espalda como muestra de su disgusto. Entonces la ataron por los pies a un caballo y la arrastraron por los empedrados de toda la ciudad. No contentos con que las piedras agudas desgarraran su cuerpo, la golpeaban con el látigo. Por último, la lapidaron en el mismo sitio donde mataron a san Metrano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario